Atrapados por la novela

Debido a la falta de tiempo no puedo subir capítulo todos los días, el nº de ellos dependerá de la semana. Gracias a todos.

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lunes, 17 de mayo de 2010

CAPÍTULO 23: EL CORREO

Cuando Lis llegó a su casa le dijo a su madre que no quería comer nada porque se encontraba mal y que se subía a su cuarto para descansar.

Estando tumbada en su cama, Lis se puso a pensar en todo lo que había pasado aquel día. El rato que había pasado con Derek, la pelea de los dos chicos, lo que le había dicho Derek…

Y lo que ella le había solado a Dimitri. No creía que hubiera hecho nada malo. Ella no era de su propiedad. Además, no creía que sintiera algo medianamente fuerte como para que fuera capaz de enzarzarse en una pelea por ella. ¿Tenía que hablar con él?

Después de romperse la cabeza un rato se levantó de la cama y encendió el ordenador.

Tenía un correo.


Lis se quedo helada. ¿Y esto? Genial. Menudo día. Se había peleado con Dimitri y encima ahora el nuevo le decía que no quería saber nada de ella. Pero había algo en la manera de actuar de Derek que le hacía albergar esperanzas hacia él.

Tanto pensar sobre aquello le daba dolor de cabeza así que se tomó una aspirina y volvió a la cama para dormir un poco.

A las dos horas de estar durmiendo su madre llamó a la puerta y la despertó.

-Cariño tus amigas han venido a verte.

-Vale mamá, gracias – su voz sonaba muy floja. Acababa de despertarse y tenía la boca pastosa.

Sus amigas se sentaron en la cama. Empezaron a bombardearla a preguntas. ¿Con quién tenías que hablar? ¿Y eso? ¿Y por qué?

¡Parecían niñas pequeñas! Lis les contó todo el embrollo de pelea y les enseñó el e- mail.

-Tía…ese chico está pilladísimo por ti.

-¡No digas tonterías! – le replicó a Marta.

-Pues yo creo que Dimitri pasará de ti a partir de ahora.

-¡No! ¡Eso no puede pasar! ¡Seguro que no es capaz! – Lis chillaba como una loca.

-Chicas tranquilas, sea lo que sea lo averiguaremos mañana – las tranquilizó Bea -. La noche del sábado ya está aquí.

Fin del capítulo 23


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